Me cabe el honor de comunicar, como Comendador que soy de esta acreditada institución caballeresca y segoviano de nacimiento, la siguiente convocatoria:
Hoy, sábado 13 de noviembre de 2010, tendrá lugar en la Muy Noble y Muy Leal Ciudad de Segovia, la solemne Ceremonia de Cruzamiento de Caballeros e imposición de Lazos de Damas de la Imperial Orden Hispánica de Caballeros de Carlos V en la Sala de la Galera del Real Alcázar de Segovia.
La Sala de la Galera fue mandada construir en 1412 por la Reina Doña Catalina de Lancaster, viuda entonces de Don Enrique III "el Doliente", durante la menor edad de su hijo el Rey Don Juan II de Castilla. Diego Fernández de Arévalo fue su arquitecto y se cubrió con un extraordinario artesonado mudéjar.
Al decir de cronistas y viajeros, era el salón más hermoso del Alcázar, aun cuando el de Reyes le superara en suntuosidad; se cubría con una armadura de madera de cinco paños, ricamente dorada y policromada, apoyada en un singular friso de mocárabes, todo ello del gusto mudéjar, tan característico de los reyes de la Casa de Trastámara. Luego, en tiempos de Felipe II, se realizaron algunas reparaciones para restañarle las heridas sufridas durante la guerra de las Comunidades y acondicionarla para los grandes fastos que tendrían lugar con motivo de los esponsales del monarca con su cuarta esposa, Ana de Austria, celebrados aquí en 1570.
La armadura apoya en un suntuoso friso de tres metros y medio de altura, que consta de dos partes claramente delimitadas. La primera queda definida por dos cintas con sendas inscripciones, en caracteres góticos dorados sobre fondo azul, en una de las cuales, la inferior, se hace referencia a la construcción de la Sala y en la otra, a modo de invocación, se recita, en latín, la oración "Adorámoste Cristo". Entre ambas se dispone una serie de tarjetones cuadrados y rectangulares, en yeso, con decoración geométrica y floral varia, alternando con escudos del Reino de Castilla y León, siendo esta la única parte original que se conserva del conjunto medieval. La parte superior se compone de una primera franja de seis filas de mocárabes sobre columnillas, que avanzan escalonadamente y, luego de una zanefa plana con decoración geométrica, una segunda franja de mocárabes, de menor tamaño, a modo de cornisa. Toda la decoración, tanto la del artesonado como la del friso, se ha realizado en oro fino y con pinturas a la caseina, utilizando las mismas técnicas y procedimientos que en la Edad Media.
Bajo el Patrocino de Santa Bárbara y la atenta mirada de la Reina Isabel la Católica que preside, silente, desde el mural que pintara Muñoz de Pablos, ingresarán en la Imperial Orden los nuevos Caballeros y las nuevas Damas.
Al decir de cronistas y viajeros, era el salón más hermoso del Alcázar, aun cuando el de Reyes le superara en suntuosidad; se cubría con una armadura de madera de cinco paños, ricamente dorada y policromada, apoyada en un singular friso de mocárabes, todo ello del gusto mudéjar, tan característico de los reyes de la Casa de Trastámara. Luego, en tiempos de Felipe II, se realizaron algunas reparaciones para restañarle las heridas sufridas durante la guerra de las Comunidades y acondicionarla para los grandes fastos que tendrían lugar con motivo de los esponsales del monarca con su cuarta esposa, Ana de Austria, celebrados aquí en 1570.
La armadura apoya en un suntuoso friso de tres metros y medio de altura, que consta de dos partes claramente delimitadas. La primera queda definida por dos cintas con sendas inscripciones, en caracteres góticos dorados sobre fondo azul, en una de las cuales, la inferior, se hace referencia a la construcción de la Sala y en la otra, a modo de invocación, se recita, en latín, la oración "Adorámoste Cristo". Entre ambas se dispone una serie de tarjetones cuadrados y rectangulares, en yeso, con decoración geométrica y floral varia, alternando con escudos del Reino de Castilla y León, siendo esta la única parte original que se conserva del conjunto medieval. La parte superior se compone de una primera franja de seis filas de mocárabes sobre columnillas, que avanzan escalonadamente y, luego de una zanefa plana con decoración geométrica, una segunda franja de mocárabes, de menor tamaño, a modo de cornisa. Toda la decoración, tanto la del artesonado como la del friso, se ha realizado en oro fino y con pinturas a la caseina, utilizando las mismas técnicas y procedimientos que en la Edad Media.
Bajo el Patrocino de Santa Bárbara y la atenta mirada de la Reina Isabel la Católica que preside, silente, desde el mural que pintara Muñoz de Pablos, ingresarán en la Imperial Orden los nuevos Caballeros y las nuevas Damas.
El Gran Maestre de la Imperial Orden, el Serenísimo Señor Don Enrique de Borbón, presidirá la Ceremonia y recibirá a los neófitos en el seno de esta gran Corporación que honra la figura del César Carlos y la proyección de España en las Américas.
Comienzo de la Ceremonia: 19´30 horas. Alcázar de Segovia.
Cocktail y Cena de Gala: 21 horas. Hotel Cándido.
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