ENRIQUE VI DE HOHENSTAUFEN

El Emperador Enrique VI según el Códice Manesse

Dedicábamos ayer nuestra entrada a glosar el encuentro siciliano sostenido entre las Órdenes Teutónica y de San Lázaro. Un encuentro histórico que tenía por marco las actividades de la Academia Teutónica Enrique VI de Hohenstaufen. Hoy vamos a conocer algunos datos sobre la biografía de este emperador del Sacro Imperio cuyos restos descansan en tierras de Sicilia.
Enrique VI, Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, nació en la ciudad de Nimega en noviembre de 1165.

Era hijo de Federico I Barbarroja y de Beatriz, Condesa de Borgoña. Contrajo matrimonio con la princesa Constanza I de Sicilia. 

Fue coronado como Rey de Romanos en la ciudad de Bamberg en junio de 1169 y como Emperador en 1193 por el papa Celestino III en Roma junto a su esposa. 

Enrique VI y Constanza I en el "Liber ad honorem Augusti" de 1196

En 1190 y 1193 logró imponerse sobre los nobles alemanes que se le oponían, acaudillados por Enrique el León y que contaban con la ayuda del papado y del rey de Inglaterra, Ricardo Corazón de León, al que llegó a apresar tras su segundo éxito. A pesar de la victoria mencionada no pudo alcanzar su objetivo de convertir en hereditario el trono del Sacro Imperio (causa del enfrentamiento con la nobleza alemana, el papado e Inglaterra) pero en 1194, tras un primer intento fallido en 1191, logró el trono de Sicilia, tras conquistarla, pues había reclamado la corona sícula como herencia de su esposa.

Enrique VI en las "Acta Sacnti Petri in Augia"

En esta campaña hubo de liberar a la propia princesa Constanza, su esposa, que había sido capturada en Salerno por los partidarios del pretendiente normando al trono siciliano, Tancredo de Lecce que se había hecho coronar Rey de Sicilia.

Enrique VI desencadenó una durísima represión contra los nobles y obispos que asistieron a la coronación de Tancredo y muchos fueron quemados vivos en un campo cerca de Palermo.

Sello Imperial de Enrique VI

Foto: Acoma

Tras someter toda disidencia en Sicilia, el Emperador y Rey, anunció su deseo de liderar una cruzada alemana a Tierra Santa. Para que no hubiera problemas con su sucesión, decidió elegir a su hijo Federico Roger como Rey de Romanos, pero muchos nobles, que conservaban sus derechos a una corona,que seguía siendo electiva, se opusieron en la Dieta Imperial celebrada en diciembre de 1195. Finalmente logró su propósito un año después. Pero cuando Enrique VI se estaba preparando para ir a la cruzada, estalló una revuelta en Sicilia, tal vez instigada por su esposa y el Papa. La revuelta fue sofocada, pero el Emperador murió el 28 de septiembre de 1197 a causa de la malaria o la disentería en la ciudad siciliana de Mesina.

Tumba de Enrique VI en la catedral de Palermo

Foto: Giovanni Dall´Orto