Durante el siglo XIII, la Corona de Castilla, al igual que se estaba haciendo en otros lugares de la Europa medieval, favoreció la creación de instituciones de enseñanza participando activamente en su desarrollo. El surgimiento de las universidades en Castilla fue impulsado por iniciativa de los monarcas, aprovechando la existencia de escuelas episcopales.
Representación medieval de las siete Artes Liberales. Miniatura alemana de 1180
La fecha de la fundación del Studium Generale de Palencia se suele situar entre 1208 y 1212, durante el reinado de Alfonso VIII de Castilla; según algunos autores por iniciativa del obispo electo Tello Tellez de Meneses, y según otros del de Osma, Rodrigo Jiménez de Rada, pero lo cierto es que mucho antes existía ya una antigua institución académica en Palencia. Prueba de ello es que se tiene constancia de que en su primitivo Studium se formaba Santo Domingo de Guzmán allá por el año 1184, y que se han conservado varias lecciones impartidas en Palencia por el maestro Ugolino de Sesso hacia el 1196; todo esto antes de la fundación universitaria.
Don Alfonso VIII de Castilla favoreció enormemente a la universidad palentina dotándola de importantes recursos económicos y contribuyendo a elevar el nivel de la enseñanza impartida en sus aulas con la llegada de maestros extranjeros, sobre todo de Francia e Italia. En este centro universitario la enseñanza se centraba en las Artes, la Teología y los estudios de tipo jurídico. Entre los maestros de la primera época se encontraban don Odo, Lanfranco, Fornelino y Guillermo Lombardo.
Alfonso VIII de Castilla
Tras el fallecimiento de Alfonso VIII, acaecido en 1214, el Estudio General de Palencia entró en crisis, agravada con el paso de los años. Pese a los esfuerzos del rey Fernado III por revitalizar la universidad y la protección del papa Honorio III, esta crisis no pudo evitarse.
En el año 1263, cuando la Universidad de Palencia estaba cercana a su desaparición, el papa Urbano IV protagonizó el último esfuerzo por mantenerla concediéndole los mismos privilegios con los que contaba la Universidad de París.
Finalmente se decidió su aunque su traslado a Salamanca, donde florecería una de las más importantes universidades españolas de todos los tiempos.
En la actualidad no queda ningún resto físico del edificio histórico de la Universidad de Palencia, lo cual no impidió que, durante el pasado año 2012, se celebrara con numerosos actos su VIIIº centenario.
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Durante estos días se están celebrando en Palencia y en algunas localidades de su provincia, una serie de actos conmemorativos de la boda, en la catedral palentina, de los primeros Príncipes de Asturias de nuestra historia: los futuros reyes castellanos Don Enrique III y Doña Catalina de Lancaster.
Este es el programa:
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