El pasado día 16 de Junio tuvo lugar en el Club de Mar del Hotel Villa Padierna de Marbella, la cena benéfica que organiza la Orden, con el fin de proveerse de fondos con los que ayudar las distintas organizaciones de caridad a las que auxiliamos.
Magníficamente organizada por nuestra Encomienda de Andalucía, asistieron más de doscientas personas, entre las que se encontraban, el Gran Maestre, Marqués de Almazán, el Gran Maestre Emérito, Duque de Sevilla, el Coadjutor, don Francisco de Borbón y su hermana, doña Cristina, el Prior de España, marqués de Armunia, el Jefe de la Casa Real de Georgia y caballero lazarista, SAIR David de Bagration y su esposa, la Princesa Anna, el Conde de Jordana, el Conde de Robledo, la Marquesa de Cortina, la Condesa de Llovera, el Marques de Valdecañas, el Duque de Huéscar, don Fernando de Borbón y un largo etcétera de personalidades de la alta sociedad andaluza y marbellí, en particular, atendidos todos ellos por el propio Comendador, don Antonio de Fortuny y el tesorero, don Alfredo García Til.
Durante la cena pronunció unas palabras el Comendador de Andalucía, Don Antonio de Fortuny, explicando que los fondos se destinarían a Cáritas y las Hermanitas de los Pobres locales y a becas para el estudio y diagnóstico de la lepra en la Fundación Fontilles.
La tómbola, que fue realizada por el tesorero de la Orden, don Alfredo García Til con la ayuda de hijos, nietos y nietas de los caballeros presentes, recaudó 2.700 € y el beneficio total que se repartirá entre las entidades mencionadas ascendió a unos 12.000 €. Es de justicia agradecer la inestimable colaboración y esfuerzo de Damas y Caballeros cómo Nieves Schmaeing, Garbiñe Larrazabal, Jose Carlos de Salamanca, Viruca Yebra y una larga lista que excede el propósito de estas líneas.
La cena fue amenizada por la soprano, Sonia García y el tenor, Fran García. Patrocinada por el propio Hotel Villa Padierna y otras firmas de prestigio como González Byass, Maximiliano Jabugo, Amigos de la Música de Marbella y Florista Virginia, la fiesta terminó a plena satisfacción de los invitados, sobre las tres de la madrugada.
Previamente a la cena, la jornada se había iniciado por la mañana, con un torneo de golf, patrocinado por la Orden que tuvo lugar en el prestigioso Club de Golf Los Flamingos donde participaron veinte jugadores y se repartieron cuatro trofeos.
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